Si pensamos en el vino, pensamos en el encuentro y la reunión con los otros, pero Vendimiario no sólo busca que quienes consuman sus productos se encuentren con sus pares sino que también busca construir un mundo mejor para todos y todas. En esta nota te contamos la historia de un vino que (literalmente) construye escuelas.

Cerca de la revolución

Desde la propia empresa, definen su producto como “una concepción diferente del vino”, esto se debe a que su nombre tiene una historia cargada de lucha social. El término “Vendimiario” proviene del calendario republicano francés de la época de la Revolución Francesa, los obreros de las viñas en Europa llaman al mes de la cosecha Vendimiario, como recuerdo de aquella revolución que transformó al mundo.

Para llevar adelante un proyecto de transformación social, donan una parte de cada botella vendida a la Fundación Ruta 40, una ONG que acompaña el desarrollo integral de más de 75 escuelas rurales próximas a la Ruta Nacional 40.

El objetivo central de esta articulación, es promover la creación de escuelas rurales para que las y los niños puedan acceder a una educación próxima a sus hogares y no tengan que recorrer largas distancias para poder hacerlo.

Detrás de todo, está el sabor

Los vinos de Vendimiario provienen de distintas provincias argentinas productoras de uvas, cada uno representa su terruño de distintas maneras. Se comercializan vinos de San Juan, La Rioja, Mendoza, Catamarca y Salta.

Vos también podés aportar tu granito de arena al cambio a través de tu compra. Si elegís Vendimiario, elegís un vino que no sólo comercializa, también piensa y trabaja por el otro. Podés encontrar sus productos en nuestra Tienda Consol.

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